Quienes vivimos en este país tenemos muchas heridas que sanar. Durante años fuimos conducidos a un enfrentamiento permanente, de persecuciones, choques y negar al otro.

No se sale de la cultura del enfrentamiento con venganza, sino fortaleciendo nuestra hermandad.

Pasaron 22 años del atentado terrorista a la AMIA. Fue un golpe a nuestro país entero, a nuestro sistema democrático, a todos y a cada uno de los argentinos.

Se trata de una deuda pendiente que tiene la sociedad argentina, pero fundamentalmente que tiene el Estado argentino. Necesitamos verdad y justicia, se la debemos a las víctimas del terrorismo y a cada uno de sus familiares. Nos la debemos a nosotros mismos.

Uno de nuestros principales objetivos es unir a los argentinos. Eso significa necesariamente mejorar nuestra democracia, fortalecer la república y contar con una justicia independiente, que actúe de forma rápida y nos dé tranquilidad.

Vamos a hacer todos los esfuerzos que estén al alcance de este gobierno para saber qué ocurrió.

En primer lugar, llamamos a reflexionar sobre cómo acompañamos a los familiares de las víctimas. Para ellos el 18 de julio de 1994 no pasó, es cada día y con un dolor que no termina.

Estamos trabajando fuertemente para sostener la independencia de la justicia para que los jueces trabajen sin presión buscando la verdad.

Darle de baja al memorándum de entendimiento con Irán fue una señal fuerte que apoya la justicia argentina.

Conformamos la Secretaria Especial de Seguimiento de la causa AMIA porque queremos verdad y justicia. 

Pusimos en marcha leyes reparatorias para otorgarles un beneficio reparatorio a los heridos y a los familiares de las victimas. 

Creemos que el juicio en ausencia es una herramienta válida que va a ayudar a seguir avanzando en la Justicia.  Se está trabajando en un borrador con distintas partes de la comunidad, y las organizaciones de la comunidad judía. No hay unanimidad pero entendemos que es una oportunidad que merece un debate profundo y un consenso amplio. De esa manera, el tema del atentado siempre va a estar vigente, y este es un ejercicio de la memoria.