Palabras del presidente de la Nación, Alberto Fernández en la entrega de la pensión no contributiva 200.00 a personas con discapacidad, sede de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS)

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Palabras del presidente de la Nación, Alberto Fernández en la entrega de la pensión no contributiva 200.00 a personas con discapacidad, sede de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS)

Buenos días a todos y a todas, gracias por acompañarnos, estuve hace un año, aquí, en estos edificios formidables, que la Fundación Eva Perón, hizo alguna vez, y que todavía tienen vida y a todos nos conmueve.

Hace un año vine, dije, entonces dije que teníamos cosas que reparar, cosas que resolver y veo que muchas de estas cosas ya se están resolviendo no sólo en materia edilicia, sino fundamentalmente en materia de resolución de derechos para los hombres y mujeres, que sobrellevan alguna discapacidad.

Yo escuchaba a Fernando con atención; el comenzó sus palabras recordando que mañana el 13 de agosto, como el día en que perdió la vista. Y es muy impactante, es impresionante porque uno ahí adquiere verdadera dimensión de lo que cambia la vida de una persona sobrellevar una discapacidad. Él recuerda ese día como un hito en su vida y eso es realmente impresionante para alguien que no tiene que sobrellevar alguna discapacidad.

La verdad es que eso es lo que tiene que hacer es hacernos pensar, reflexionar colectivamente sobre la necesidad que tenemos de igualar a los que sobrellevan alguna discapacidad, a las personas que tienen discapacidades, porque – definitivamente – lo que tenemos que hacer es que su vida se altere lo menos posible y que sus posibilidades sean plenas para seguir desarrollándose completamente como seres humanos, en una sociedad – donde tenemos que ser honestos – que le cuesta entender el tema de la discapacidad. También confieso que me impresionó mucho cómo empezó su discurso Fernando, que una persona recuerde el día en que perdió la vista y recuerde el momento en que su vida cambió nos tiene que llamar la atención a todos y todas acerca de la necesidad que tenemos de dar plenas garantías a aquellos que tienen una discapacidad para que su vida no se altere de semejante modo.

Este plan Accesar que hoy suma 11 nuevos municipios, es un plan importante porque, en verdad, involucra a todos los municipios del país o busca involucrar a todos los municipios del país en esta tarea no sólo de concientizar sino de hacer las obras necesarias para que la vida de quien padece o sobrelleva una discapacidad sea más fácil, sea más fácil simplemente. Y esto –aunque muchos no entiendan – en una sociedad inclusiva como la que nosotros queremos eso es un derecho que tienen este colectivo de personas. Que, además, no son pocas y esto es algo que tenemos que llamar la atención, de la sociedad argentina, pues hay más de 5 millones de personas que padecen – algún tipo – de discapacidad. Son 5 millones de personas a las que debemos prestarle mayor atención, son casi el 13 por ciento de nuestra sociedad; no es un número menor, es un número importante.

Y eso nos obliga a nosotros a prestarle la atención que el problema merece y el problema cuál es: dar derechos, dar igualdad, hacer lo necesario para incluir a cada uno y a cada una de esas personas a la vida cotidiana para hacerle más llevadero el tiempo que le toca vivir.

Está claro – y Fernando, en estos días lo ha vivido – que no todos tienen la misma mirada que nosotros; está claro que no todos piensan en los derechos de quien sobrelleva una discapacidad; está claro que muchos piensan que seguramente no debemos usar los recursos del Estado en atender – con pensiones, por ejemplo – a personas que lo están necesitando por las características que esa pensión tiene, pues esa pensión no solamente es una suma equis de dinero, sino fundamentalmente es permitirle el acceso a la movilidad pública, el acceso a la educación, el acceso a la salud para muchas personas que – de otro modo – no tienen acceso a eso.

Me acuerdo, Paula, que cuando llegamos al gobierno y antes también, vivía obsesionada por el maltrato que tenían las personas que reclamaban sus pensiones por discapacidad y acá me voy a permitir marcar algunos datos, en estos días, Fernando, que además tuviste que salir a explicar lo obvio… alguien, que nos acusa de estar dando pensiones truchas, alguien que fue ministro, en este país, durante gran parte de los cuatro años, que presidieron mi llegada al gobierno. Pero hay algunos datos que yo quiero marcar para que todos entendamos que no todo es lo mismo y muchas veces cuando la sociedad descontenta con una realidad difícil, que nos toca enfrentar, a veces, pierde confianza en la política y tiende a pensar, que finalmente, en la política todo es igual, todo es lo mismo y se desalienta mucho con eso. Pero la verdad no todos es lo mismo. Nosotros, hoy, acabamos de dar la pensión 200.000 y estamos orgullosos y queremos dar las pensiones que hagan falta y que merezcan los argentinos y las argentinas que lo necesiten. No es una dádiva del gobierno, es un derecho que tienen, porque a nosotros – hasta aquí – nadie nos ha convencido que es falso, aquello que decía Evita, que “si hay una necesidad, hay un derecho”. Y por lo tanto, nosotros no estamos regalando nada, estamos reconociendo derechos a gentes que lo necesitan, simplemente, pero –en aquellos años, entre 2016 y 2019 – se dieron de baja 170.000 pensiones. Nosotros, hoy, estamos acá celebrando que estamos dando 200.000 pensiones. (APLAUSOS).

Paula me decía, recién, cuando tuvimos una reunión con Fernando, y con la otra Paula, ahora son dos Paulas, acá, en la ANDIS, se multiplican las Paulas, que tenemos que buscar el modo de agilizar el trámite, porque a veces, la certificación médica demora las cosas y tenemos que buscar el modo de hacerlo más rápido. Esa es la preocupación, que me expresan, pero – la verdad – que en esos cuatro años denegaron 6 de cada 10 solicitudes de pensión. Acá la preocupación es cómo hacemos más fácil el acceso a la pensión y en aquel momento era buscar la excusa para no dar la pensión. Y cuando nosotros llegamos, al gobierno, en ese momento, estaban cajoneadas 145.000 solicitudes de pensión para personas con discapacidad. ¿Todo es lo mismo? No, no todo es lo mismo. Si yo dijera que estos son los números, de mi gobierno, estaría lleno de vergüenza y como argentino también me llena de vergüenza, que un gobierno, que además tuvo una vicepresidenta con una discapacidad haya hecho esto con las personas con discapacidades.

Ahora, lo que estoy haciendo yo no es tampoco una excepción, es lo que hemos hecho siempre porque Evita nos marcó a todos y Néstor y Cristina también hicieron muchas cosas por la discapacidad. Déjenme releerles muchas cosas hechas desde el 2013 y el 2015: Reconocer la gratuidad del transporte. Se ratificó la convención sobre los derechos de las personas con discapacidad y se les otorgó rango constitucional. Se instituyó la Asignación Universal por Hijo que en discapacidad triplica su valor. Hubo muchas otras normas que se dictaron en esos años que fueron avances concretos de derechos de las personas con discapacidad. Con lo cual, la verdad lo que estoy haciendo yo no es una excepción, es seguir una lógica que nos gobierna, que nos gobernó en todos los tiempos, en los tiempos de Néstor, en los tiempos de Cristina y en estos tiempos donde asumimos que la necesidad de igualar y de incluir a las personas con una discapacidad es imperiosa y que la necesidad de que el Estado esté presente para socorrer con estas pensiones a personas que sobrellevan alguna discapacidad es imperioso

Yo no sospecho de quién viene a buscar una pensión de este tipo al Estado. No me daría la cara para descalificarlos. Lo que haría es lo que hace Paula, que me contaba recién: ver de qué modo agilizamos los trámites para que puedan acceder más rápido, porque allí hay una persona que está necesitando del socorro del Estado y tiene un derecho que le asiste de ser incluida en la sociedad, garantizándole todo lo que el Estado debe garantizarle para que pueda desarrollarse del mejor modo en su vida.
Y creo que también estoy honrando con esto una frase que han descubierto en uno de los edificios de acá, que al pintarlo habían descubierto una frase de los años en que esto era parte de la Fundación de Eva Perón, que pertenecía a Juan Perón, y que había dicho Perón, era parte de un discurso que la delegación ante la organización internacional del trabajo en el año 51 Perón incluyó. La frase decía: “El Gobierno argentino tomará la actitud que quiera su pueblo y ninguna otra”. Y yo siento que estoy tomando la actitud que el pueblo argentino quiere, que es: incluir absolutamente a todos y todas las argentinas. No hacer una Argentina de pocos, sino hacer una Argentina de todos; y una Argentina donde todos tengamos los mismos derechos, una Argentina donde todos tengamos las mismas posibilidades de desarrollarnos, de trabajar y no ser segregados por ninguna causa. Yo estoy seguro que esa es la aspiración central del pueblo argentino y de lo que estoy seguro es que acá no estamos dando nada trucho ni estamos malgastando la plata del Estado. Acá estamos poniendo al Estado en un lugar donde debe estar, que es allí donde las condiciones de igualdad se pierden, tiene que aparecer el Estado para poner igualdad. Y eso es lo que estamos haciendo. (APLAUSOS).

Así que Fernando, gracias por todo este trabajo, gracias a las dos Paulas y a seguir adelante porque todavía quedan muchos argentinos y argentinas que necesitan de nuestra asistencia. Gracias a todos y a todas. (APLAUSOS)