El presidente Mauricio Macri inauguró el oleoducto Loma Campana - Lago Pellegrini en Vaca Muerta

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Palabras del presidente Mauricio Macri al encabezar la inauguración del oleoducto Loma Campana-Lago Pellegrini en Vaca Muerta

Buenos días, buenos días. Gracias, querido gobernador, Omar, por recibirme una vez más en esta maravillosa provincia, por recibirme en Vaca Muerta, donde Vaca Muerta es sinónimo de energía, de esa energía de la que tantas veces hemos hablado, que es fundamental para poder desarrollar el país, para que el país funcione, nuestras escuelas, nuestros hospitales, los comercios, nuestras casas, las industrias. Que tengan energía en cantidad y a buen precio les permite desarrollarse, y, si se desarrollan, terminan explicando por qué Vaca Muerta también es trabajo. Claramente, Vaca Muerta es trabajo y no es un lugar distante, porque tal vez no tienen todos los argentinos la suerte de conocer Neuquén, ojalá la puedan llegar a conocer porque es una provincia también, para visitarla, increíble.

Vaca Muerta es algo cercano a todos, y ¿por qué? Porque Vaca Muerta genera trabajo en todo el país. Hace poco estuve, Omar, en Olavarría, en una metalúrgica, y cuando llego, “¿cómo están?” “No damos abasto. Ya hemos tomado a todos los que había en Olavarría para que nos ayuden, pero no podemos cumplir con todos los pedidos que nos hace Vaca Muerta”. Y lo mismo me pasó en Santa Fe, en Rosario, en el Gran Buenos Aires, y está pasando en 15 provincias. En 15 provincias de la Argentina están trabajando argentinos para Vaca Muerta. Estamos hablando, de fuera de Vaca Muerta, más de 60 mil puestos de trabajo. Y no es Vaca Muerta solamente Neuquén y grandes empresas. Estamos hablando de decenas de pymes que se están poniendo en marcha en toda la Argentina, generando lo más importante que todos los argentinos tenemos que conquistar: buen trabajo. Buen trabajo. Y, por eso, hoy quiero felicitar a YPF, a Tecpetrol, a todos los que han hecho posible este oleoducto, que también, como decía el Gobernador, se anticipa lo que viene, a que venimos creciendo, y demuestra que los argentinos somos capaces de hacer las cosas bien, muy bien.

Recién hablábamos con el representante de los trabajadores. Los argentinos puestos a competir le podemos ganar a cualquiera en el mundo, pero no de cancheros, sino arremangándonos, haciendo lo que hay que hacer todos los días, y mejorando todos los días. Porque, cada vez que visito Vaca Muerta, me dicen “hacemos esto mejor y aquello mejor” y “lo hacemos más barato y más económico”. Y eso, ¿qué significa? Que van a venir más argentinos a ayudar, porque los que están, están haciendo las cosas bien. Y esto lo hemos hecho en tres años y medio y hay que recordar, ¿dónde estábamos, Omar, hace tres años y medio? Hace tres años y medio, veníamos y recibimos un país que importaba energía y cada vez más, después de haber sido un gran exportador de energía, porque en el 2006 la Argentina exportaba decenas de miles de millones de pesos de energía al mundo. Y eso, ¿qué significa? Que había decenas de miles de argentinos trabajando para producir esa energía para el mundo. Y, en el 2013, pasamos a importar decenas de miles de millones de pesos. ¿Por qué? Porque nos dijeron también que la energía era gratis, que podíamos dejar calefaccionada nuestra casa todo el día aunque no estuviésemos, que podíamos poner el aire acondicionado a cualquier temperatura, que podíamos tener todas las luces prendidas. Y ¿qué es lo que empezaba a suceder en 2015? Se habían quintuplicado los cortes de luz. Por ese camino, en poco tiempo íbamos al colapso que vemos hoy en nuestros hermanos venezolanos, que no tienen energía, que no tienen agua. Y eso lo revertimos porque también, al revertirlo, cuidamos y evitamos injusticias, porque en algunos lugares la energía era gratis y en otras provincias había que pagarla muy cara. Pero pasaron tres años y medio y estamos hoy, acá, una vez más, en esta revolución de crecimiento, en esta alegría compartida por ustedes. Recién le decía a Omar cuando caminábamos “qué lindo ver”, me dijo “tiene 27 años”. Lo quiero matar, 27 años, “que todos acá estén tan entusiasmados con lo que están haciendo, sintiéndose tan protagonistas”.

Esto es lo que sueño como Presidente: ir encendiendo cada rincón del país para que esto mismo se replique en cada rincón de la Argentina porque cada argentino tiene algo importante para aportar. Pero la pregunta que me hago es qué cambió, si Vaca Muerta existía hace 50 años. Me mostraba recién el presidente Gutiérrez, que se habla de Vaca Muerta desde principio del siglo pasado. ¿Qué pasó si Vaca Muerta estaba ahí y hoy está pasando esto? ¿Qué cambió? Cambiamos nosotros, nosotros cambiamos. Como decía Omar, nos decidimos a sentarnos alrededor de una mesa, a dialogar, a escucharnos, a trabajar en equipo, con esa primera mesa que lanzamos con Omar en 2016. En esa época estaba Juanjo, ahora le sigue la posta Gustavo Lopetegui. Y en esa mesa nos sentamos con los trabajadores, con las empresas y les dijimos “tenemos esto, ¿lo vamos a hacer realidad o vamos a seguir como en tantas otras cosas boicoteándonos, teniendo actitudes autodestructivas?” Y no, nos pusimos a trabajar y en tan poco tiempo volvimos a exportar gas a Chile, después de 11 años. Pusimos en marcha esta revolución de empleo, y esto no es casualidad. No hubiese sido posible si seguíamos en default. ¿Qué significa? Si seguíamos sin pagarles las deudas a aquellos que nos prestaron. No hubiese sido posible si seguíamos con un cepo, que para comprar y vender dólares hay que tener a algún amigo, entonces, el que tiene que traer los dólares, que decía Omar, para desarrollar Vaca Muerta, si no se los van a dejar llevar cuando termina de hacer su inversión, no viene. Y había que corregirlo y lo corregimos.

Cuando yo les hablo de los cimientos, les hablo de esto. Que teníamos que hacer los cimientos. A mí me hubiese encantado, y estoy seguro de que a Omar también, arrancar el primer gobierno como Presidente con energía disponible, como ahora vamos a tener. Porque ahí solamente nos ocupábamos de empezar a crecer, porque no había que hacer las bases. Pero, si no hacíamos esto no teníamos el futuro que se nos está empezando a abrir por delante, todas estas oportunidades que tenemos por delante existen porque hemos hecho muchas de estas cosas que tal vez no se ven, pero están, y ahora están.

Y quiero destacar cómo lo hicimos. Lo hicimos, insisto, dialogando, como fue la vocación de este gobierno desde el primer día. Antes de Vaca Muerta, ya habíamos firmado, en Purmamarca, el acuerdo por la educación. ¿Te acordás, Omar? Para todos comprometernos en mejorar la calidad educativa porque, claramente, esa es la herramienta fundamental para que nuestros chicos tengan acceso a un buen trabajo el día de mañana. Y ahí firmamos, casi todos los gobernadores con el Gobierno nacional, y hemos avanzado, como lo vimos, en las pruebas de lengua, hace poco.

Y ahora, una vez más, frente a tantas dudas que tiene el mundo acerca de si vamos a volver atrás o si vamos a ir hacia el futuro, si vamos a continuar por este camino, yo he invitado a todos, y nos hemos auto invitado entre muchos, a que firmemos de vuelta acuerdos, consensos sobre las cosas básicas, elementales que vamos a respetar, y que todos los países que nos rodean ya lo han hecho hace rato. Esas herramientas que permitan decirle al mundo que esto que hemos empezado va a continuar. Y por eso hace falta también generosidad, porque lo importante no somos los dirigentes políticos, no somos nosotros, acá, los protagonistas excluyentes por los cuales empiezan y terminan las cosas. Los importantes son ustedes, son los argentinos, que consigamos oportunidades, como esta de Vaca Muerta en todo el país.

Por eso, es un momento de tener generosidad, y sentarse alrededor de una mesa, y acordar estas cosas para llevar tranquilidad, llevar futuro a la casa de todos los argentinos. Este es un año histórico, bisagra en la historia de nuestro país, donde se define si tendremos 25 años de crecimiento permanente o volveremos a sumirnos en la oscuridad y la confrontación. Por eso, es importante que tengamos esta generosidad de clarificar quiénes somos los que queremos realmente apostar a ese futuro distinto.

Decirles que me da mucho orgullo lo que han hecho acá. Me siento muy orgulloso como Presidente y como argentino de ver lo que somos capaces de hacer. Y confirmarles que, si viento en contra, con todas las tormentas que hemos tenido que enfrentar en estos tres años y medio, hemos logrado muchas cosas como Vaca Muerta, imagínense lo que podemos lograr en los próximos años, con un poco de viento a favor y ya habiendo construido las bases.

Y lo vamos a lograr por ustedes, por la capacidad que ustedes tienen de transformar la realidad. Este es el camino, creer en nosotros mismos, creer en nuestro trabajo, no creer en soluciones mágicas, en escuchar más esas propuestas de atajos facilistas. Esas son las que nos llevaron a tener un país con muchos argentinos en la pobreza. Y, estamos acá para vencer la pobreza, para generarles oportunidades a todos los argentinos. Y las vamos a generar así, como dijo el gobernador Gutiérrez, como ha hecho la gente de YPF, Tecpetrol, todos ustedes y las más de 100 empresas que ya están trabajando en Vaca Muerta, trabajando, apostando a superarnos, porque todos los días vamos a ser mejor.

Muchas gracias a todos.