El presidente Mauricio Macri inauguró la rehabilitación de la planta potabilizadora Donato Gerardi, en Punta Lara, provincia de Buenos Aires

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PALABRAS DEL PRESIDENTE DE LA NACIÓN, MAURICIO MACRI, EN EL ACTO DE INAUGURACIÓN DE LAS OBRAS DE REHABILITACIÓN Y MODERNIZACIÓN DE LA PLANTA POTABILIZADORA DONATO GERARDI EN PUNTA LARA, PROVINCIA DE BUENOS AIRES

Buen día, buen día, una alegría estar hoy acá Gobernadora, acompañándote una vez más en un día importante para los bonaerenses; a Rafael que nos conocemos hace tantos años, hemos hecho tantas cosas juntos; a los vecinos de Berisso, de Ensenada, La Plata; a los intendentes; a los trabajadores de la empresa.

Sesenta. Este año fue un año para mí duro en eso porque cumplí sesenta, fue toda una reflexión y la compartí con todos ustedes en ese momento. Es mucho tiempo sesenta años, son seis décadas, seis décadas que en mi caso han sido marcadas por el trabajo, porque soy de familia italiana, como Rafael, y mi viejo lo que me inculcó fue el trabajo, arrancar bien temprano como estamos hoy, porque tuvimos que arrancar bien temprano para estar hoy con ustedes, siempre pensando que en el trabajo hay una oportunidad de conocer a alguien, de relacionarte con otros vecinos, con otros ciudadanos y hacer algo juntos, algo que nos haga mejorar, que nos haga sentir protagonistas, que nos demuestre que somos capaces de hacer nuestro aporte. Y así elegimos este día, otra vez arrancar trabajando María Eugenia, este día en que otros, en un momento difícil del país, deciden parar, nosotros no, nosotros estamos acá trabajando para construir ese futuro mejor para todos.

Y sesenta años, sesenta y dos, para ser exactos, son los que tiene de vida esta planta y -como dijo María Eugenia- desde que se terminó nunca nadie más se acordó de ver cómo funcionaba la planta, cómo estaban todas las instalaciones, toda la infraestructura, de qué les pasaba a los vecinos de Berisso, de Ensenada y La Plata cuando abrían una canilla y sale agua para lavarte las manos, o para bañarte, o para cocinar. No, no existía, como mostró María Eugenia, esos caños podridos eran los que llevaban algo tan importante en la vida diaria de todos nosotros que es el agua. Y nosotros en dos años y medio, desde que llegamos, evaluamos, miramos, ¿y qué hicimos? Modernizamos, tecnificamos, ampliamos la capacidad de esta planta. Y no es un relato, no es un cuentito, esto es de verdad, lo acaban de ver, las cámaras lo registraron, vieron las fotos de cómo estaban cuando llegó la Gobernadora y su equipo, y cómo está hoy y lo hicimos ¿Y por qué lo hicimos? Porque esto es parte del cambio, del cambio que ustedes eligieron poner en marcha hace tres años y medio, un cambio que decidió dejar de darle la espalda a cosas fundamentales en la vida de los argentinos, tan fundamentales como esto, el acceso -como tienen a partir de ahora- a mayor cantidad de agua, mayor calidad, mayor seguridad. Y eso es el valor de decir “vamos a hacerlo” por más que se vea o no se vea, porque no es cuestión de qué es lo que a mí políticamente me conviene, es cuestión de hacer lo que la gente necesita. Y eso es lo que hicimos, y esas son las bases de las cuales yo les vengo hablando ya hace años que tenemos que construir, porque sobre esas bases son las que se desarrolla todo ese país que soñamos y nos merecemos, sin atajos, sin mentiras, sin soluciones mágicas, porque tantas veces nos han propuesto soluciones mágicas que después nos llevaron a la frustración, a la desilusión, y esto es de verdad.

Y obras como estas son parte de esas bases que las podemos hacer, primero, porque nos coordinamos, porque acá hay un equipo que trabaja en conjunto, un equipo de la Nación que trabaja junto con el de la Provincia. Acá es fácil, porque con la Gobernadora que trabajamos en equipo desde hace años, lo hacemos de memoria, pero también lo hemos hecho con gobernadores de todas las provincias y que no son de nuestro partido ¿Por qué? Porque pensamos en los argentinos y no en qué es lo que políticamente nos conviene. Y esto que estamos haciendo también se puede hacer porque pensando en la gente cuidamos los recursos de la gente, entonces hacemos licitaciones transparentes, con las mejores empresas, las obras empiezan y terminan en fecha y cuestan lo mínimo necesario, y eso también es muy importante.

Y todo esto tiene que ver con estar buscando un futuro inédito, haciendo cosas que nunca habíamos hecho antes, porque ahora estamos yendo a la raíz del problema, estamos sacando esas raíces podridas y llevando a cabo este esfuerzo de construir esos cimientos que encaminan la Argentina hacia un futuro distinto, totalmente distinto, que nunca había pasado en décadas.

Por eso estos 62 años son muy simbólicos, aunque tal vez el período sean 80 años de este tipo de mentiras y ocultamientos, porque sería muy fácil agarrar y dar un giro hacia atrás, y tomar los recursos que tenemos, que no son muchos, pero igual gastarlos todos hoy y comprometer a las futuras generaciones, pero no lo vamos a hacer. O sería muy fácil también hoy estar en Cadena Nacional y obligarlos a escucharme hablar todos los días lo que tengo para decirles, y tampoco lo vamos a hacer. O sería también mucho más fácil solamente manejarnos con los periodistas amigos, poner mucha propaganda de lo que hicimos y de lo que no hicimos para a ver si los convencemos. O aún más fácil con la Gobernadora estar inaugurando una obra que no se terminó, para sacarnos una linda foto. Pero eso no lo vamos a hacer porque eso sí sería volver atrás, y los argentinos hemos decidido no volver atrás. (APLAUSOS)  

Sabemos que el cambio es una aventura, y como toda aventura tiene riesgos, pero ese cambio es que nos va a llevar hacia el futuro, y volver al pasado sería autodestruirnos, sería perder dos o tres generaciones más antes de volver a encontrar una oportunidad como la que el mundo nos está dando hoy.

Por eso hoy estamos acá para ratificar que tenemos un compromiso, que nos han dado un mandato, que me han dado un mandato como presidente para llevar bien adelante esta bandera del cambio, y que lo voy a cumplir con humildad, con convicción, con trabajo, con dedicación, y no pensando en lo que a mí me conviene sino en lo que a ustedes les conviene. Porque para eso estoy acá, tenía millones de alternativas para hacer lo que a mí me convenía, elegí estar acá porque creo en ustedes, porque confío en ustedes, porque esta obra me demuestra lo que ustedes pueden hacer, porque los mismos trabajadores, con una mala conducción, estaban perdiendo el tiempo, el esfuerzo y poniendo en riesgo la salud de tantos bonaerenses; y los mismos, con una buena conducción, con una conducción sana, han hecho esta obra y le han llevado tranquilidad a cientos de miles de bonaerenses.

Entonces quiero decirles que claramente dejar 80 años atrás, 80 años de ocultamientos, de mentiras, de corrupción, de promesas incumplidas no es fácil, todos sabíamos que no era fácil, y este es el momento de demostrar cuánto coraje tenemos, cuánta convicción tenemos, y en este momento más que nunca, que el mundo o los mercados están dudando si nosotros vamos a volver atrás, se equivocan, nosotros aprendimos, aprendimos de lo que nos pasó, y queremos todos los argentinos encontrar nuestro lugar desde el trabajo, desde nuestro aporte para sacar a este país adelante. No queremos más mentiras, no queremos más ocultamientos, queremos que con la verdad sobre la mesa encaremos juntos este trabajo que hemos encarado, y que lo vamos a seguir encarando.

Felicitaciones Gobernadora, felicitaciones Rafael y a todo el equipo, gracias vecinos por acompañarnos y a seguir, a seguir porque esta Argentina es maravillosa y se merece todo lo que estamos haciendo, porque tenemos un gran futuro por delante.

Muchas gracias a todos.