Entrevista al Presidente de la Nación, Alberto Fernández, en Crónica Anuncia, Futurock

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PERIODISTA.- Presidente, muy buenos días, Juan Amorín, Rocío Criado y todo el equipo de Crónica Anunciada en Futurock lo saludamos, ¿cómo le va?

PRESIDENTE.- ¿Cómo les va? ¿Bien?

PERIODISTA.- Muy bien por suerte, gracias por tomarse un ratito en la mañana para charlar con nosotros.

PRESIDENTE.- Caminando acá con Dylan, aprovecho para hablar con ustedes.

PERIODISTA.- Está muy bien. Bueno, se cumple un año de un día muy especial en lo personal imagino, ¿qué recuerdo tiene de aquel domingo 11 de agosto? Se escuchan los pájaros que es la prueba fehaciente que efectivamente está caminando en Olivos ¿Qué recuerdos tiene de ese día de haberse levantado y cómo lo tomó el resultado? ¿Lo sorprendió como nos había sorprendido a todos?

PRESIDENTE.- Las encuestas nos están diciendo que teníamos una ventaja tranquila y por lo tanto me desperté más o menos tranquilo. Vos sabés que to tengo una particularidad, que es que en ciertas circunstancias yo ya me entrego, ¿qué quiero decir yo con esto? Yo cuando tenía que dar un examen en la facultad, estaba muy nervioso los días previos, pero cuando entraba en la facultad todos los nervios desaparecían, porque ahí solo te queda esperar a suerte o verdad cómo te va en el examen. Y creo que el día de la elección, para mí es parecido. Los días previos son mucho más vertiginosos, especulás, llamás a uno, llamás al otro, querés saber cómo te va en tal provincia, cómo te va en la otra. El día de la elección ya estás jugado, ahí sólo te queda esperar. Y entonces, si vos me preguntás qué recuerdo de aquel día, la verdad es que lo recuerdo casi como un día normal. Me levanté, llamé me recuerdo a la seguridad, me dijeron que estaba lleno de periodistas, yo dije “qué bajón, cómo lo saco a Dylan”. Y salí a pasearlo a Dylan con cara de nada, como les propuse a los periodistas que estaban en la puerta, que me dejen pasearlo tranquilo a Dylan, y que después les prometía que volvía y hacía las declaraciones que me pedían. Y nada, después volví, desayuné en casa, nos fuimos a votar con Fabiola, después vinieron algunos amigos a ver cómo… ellos estaban más nerviosos que yo, esa es la verdad, y nada. Después a eso de los siete de la tarde nos fuimos para el búnker, y a las ocho de la noche ya teníamos los datos, esa es la verdad porque teníamos 150 mesas testigos que con mucha perfección manejaron un grupo de estadísticos, y ahí ya nos dijeron cómo estábamos, y ahí solo nos tocó esperar. Me acuerdo que hubo un momento donde la carga se frenó y ahí empezaron algunas especulaciones, Wado habló con Frigerio, Frigerio le dijo que era un problema solo de sistema, que todo iba a seguir adelante en unos minutos y efectivamente pasó.

PERIODISTA.- Bueno, fue el día donde el entonces Presidente mandó a dormir a la sociedad sin los resultados ¿Qué recuerdo tenés cuando se abrieron los resultados, cuando efectivamente surge esta diferencia enorme, que parecía ya que prácticamente coronaba al Frente de Todos como vencedor? ¿Qué recuerdo tiene? ¿Abrazó a alguien? ¿Llamó a alguien? ¿Habló con Cristina inmediatamente?

PRESIDENTE.- Abracé a todos, hablé con Cristina un montón de veces. No me preguntes a quién abracé, porque no me acuerdo. Me acuerdo, por ejemplo, que estaba tomando un pomelo o un vaso de pomelo con Estanislao, y mirando la tele, y cuando la tele ya anunció como primer resultado una diferencia grande, ahí me abracé con Estanislao, de ese abrazo sí me acuerdo, de ese sí, pero después me abracé con todo el mundo. Pero viste, es cuando hacés el gol, no sabés quien te abraza, se te tiran todos encima.

PERIODISTA.- Presidente, ¿y qué importancia tiene a un año ese triunfo? Que de alguna manera es el triunfo que simboliza la llegada a la presidencia, por la diferencia que estableció ese 11 de agosto ¿Qué importancia tiene el Frente de Todos, un año después?

PRESIDENTE.- Mirá, yo creo, sigo pensando lo mismo, ¿no? Nosotros fuimos capaces de lograr ese resultado porque fuimos capaces de forjar una unidad y todos entendimos nuestras fortalezas y nuestras debilidades. En aquella frase que me salió en febrero del 2019, si no me equivoco, cuando después de una reunión con algunos compañeros, yo molesto por los planteos que me hacían, les dije que hay que entender de una vez por todas que con Cristina no alcanza y sin Cristina no se puede, porque el peso electoral de Cristina era muy grande, y Cristina que tuvo la amplitud de acompañar y la generosidad de acompañar. Y quisiera aclarar, ella creyó que yo era el mejor candidato, por ahí podría haber sido otro, no lo sé, lo que importa es la unidad que pudimos crear y la unidad de criterio que podemos mantener aún en las diferencias. A mí la diversidad no me molesta en lo más mínimo, me molesta mucho el discurso único, eso sí lo detesté siempre. Yo me acuerdo que era militante de la (salto de audio), y cuando algún compañero me habla de verticalismo, yo le contestaba además de Perón, quién soy yo. Así que a mí la diversidad no me molesta en lo más mínimo, lo que sí creo es que no debemos perder objetivos, ni a veces ser funcionales a los otros. Creo que nosotros logramos un gran resultado en la elección, también en la general, producto de la unidad, y creo que lo que nunca debemos olvidar es que cuando nos dividieron, nos pasó lo que nos pasó, que le pasó a la Argentina, lo que nos pasó a nosotros. Es esa Argentina concentrada, esa Argentina de unos pocos, la Argentina del descarte, que deja millones de argentinos fuera del sistema. Eso nosotros no podemos permitirlo, y menos podemos permitirlo por nuestros egos, o por nuestras actitudes personales. Entonces, yo creo que ese día verifiqué que el secreto es la unidad. El que escribió en la marchita, ‘todos unidos triunfaremos’, no se equivocó, la tenía más clara que nosotros.

PRESIDENTE.- Le quería consultar sobre un tema en el cual usted viene hablando, habló de la intensión de enviar, incluso que ya estaría listo, por el aborto. Sin embargo, le quería consultar porque esta semana salió una nota en Infobae, que decía que ya estaba confirmado que este año no se iba a enviar el proyecto, ¿esa información es correcta? ¿Es así?

PRESIDENTE.- ¿Y quién se lo confirmó?

PERIODISTA.- La nota decía, por eso, fuentes oficiales, por eso le consultaba.

PRESIDENTE.- No, ese es un tema que tenemos que resolver, solo que sé, yo tengo muy en claro que cualquier argumentos sirve a otros para dividir a la sociedad, en un momento en el que tenemos que estar muy unidos por la pandemia. Eso es una convicción que yo tengo y eso lo voy a mandar en cuanto pueda, tan pronto pueda lo voy a mandar. Después tendrá la discusión parlamentaria y está bien que así sea, pero ese es un tema que la Argentina debe resolver.

PERIODISTA.- Presidente, en este sentido justamente se cruzan un poco dos temas de los que veníamos charlando, ¿no? La necesidad de la unidad, en este caso no necesariamente del Frente de Actores sino de todos los actores políticos de Argentina, y la necesidad de generar un momento en el que la sociedad tiene que estar con la cabeza puesta en la pandemia, indudablemente ¿Cómo viene viendo el aumento de casos y si considera que efectivamente va a tener que tomar una decisión restrictiva?

PRESIDENTE.- Con mucha preocupación lo veo porque veo una sociedad muy renuente a volver a una cuarentena, veo un sistema de medios que permanente alienta la libertad, entre comillas, y veo que los casos crecen, los casos aumentan. Ayer tuve una larga charla con Horacio Rodríguez Larreta y hablamos de todas estas cosas. Nosotros, en la Ciudad de Buenos Aires y en el AMBA, las camas están todavía controladas y confío en que vamos a poder controlarlo, pero necesitamos de la sensatez de la gente. Y lo que yo siento es que la gente ve que se abren los negocios y sienten que la vida volvió la normalidad, y lo que no advierte es que el virus está circulando y eso es un riesgo muy pero muy grande. Ayer, sin ir más lejos, hablé a la mañana con el Gobernador de Jujuy y está en una situación muy compleja, muy difícil. Y si ustedes hacen memoria, hace un mes y medio atrás, el Gobernador de Jujuy quería empezar las clases, abrir los bares, abrir restaurants, porque no tenía caso durante más de cincuenta días. Llegaron dos jujeños que se contagiaron en Bolivia y miren lo que pasa hoy. Entonces, hay que tener muy presente el riesgo en el que estamos, y una vez más acudir a la responsabilidad social. Yo escucho a veces en las radios, en televisión, me están prohibiendo ver a mi hijo, no, yo estoy queriendo que no se enfermen, simplemente, nadie quiere prohibir semejante cosa. Lo que uno busca es que en el encuentro no se distienda y aparezca, una vez más, el riesgo de la enfermedad, porque además cuando se contagia uno, la velocidad de contagio es enorme.

PERIODISTA.- Y en este sentido, considera que va a ser necesario a mayores restricciones, o pedirle no sé si está bien catalogarlo como un último esfuerzo a la sociedad, pero teniendo en cuenta que son las últimas semanas del invierno, y que obviamente el invierno es la etapa del año donde más camas de terapia se ocupan, ¿puede ser una opción, es una opción que está sobre la mesa de decir regresemos a una fase uno, por algunas semanas por lo menos, para tratar de contener la situación sanitaria, o por lo menos ese botón rojo todavía no está a mano, a partir de la cantidad de casos que están viendo?

PRESIDENTE.- El botón rojo siempre está a mano porque la preservación de la salud es lo más importante. Ahora, también entiendo que la gente tiene cierto hastío de estar encerrado después de tanto tiempo, yo lo entiendo, pero también yo recurro a su reflexión, a la capacidad de reflexión de cada uno. El riesgo existe, al virus lo vamos a buscar nosotros, no es que el virus nos anda buscando, nosotros lo vamos a buscar. Entonces, cuanto más tiempo estemos aislados y más alejados del otro, nuestro riesgo se minimiza. Y yo sigo reclamando esa responsabilidad. Después, yo ya sé todo, yo ya sé que queremos jugar al fútbol, al tenis, a remar, queremos hacer todo, pero sepamos el riesgo que corremos, sepámoslo, y entendamos además que el riesgo está donde menos lo esperamos. Miren lo que pasó con el fútbol, “queremos entrenar, queremos entrenar”, digo “entrenen” y en el primer testeo aparecen casos de coronavirus en los planteles. Entonces, si no nos damos cuenta que estamos en una pandemia, que no es un decreto del poder Ejecutivo que creó la pandemia y no hay un decreto por lo tanto que la derogue, tenemos que tener mucho cuidado, mucho cuidado, mucho cuidado, y ser muy serios, porque nosotros hicimos un enorme esfuerzo para prepararnos y que nadie carezca de atención sanitaria cuando reclame. Eso está muy bien y creo que lo hicimos muy bien, pero también creo que debemos ser muy cuidadosos, no tenemos el tema resuelto, estamos lejos de tenerlo resuelto.

PERIODISTA.- Da la impresión que hay como una disociación entre lo que sucede en la calle, lo que uno percibe, lo que uno ve todos los días, con lo que uno ve que sucede en los hospitales, ¿no? Digo, quien habla con los especialistas del sistema dicen no damos abasto, está realmente preocupante la situación, hay cada vez más camas ocupadas de COVID y demás, y en la calle da la impresión que es todo lo contrario, que la situación ya está pasando.

PRESIDENTE.- Sí, no es así, por eso digo, por eso digo, no es así, no es así, hay que entender también que en la Ciudad de Buenos Aires tiende a colapsar primero el sector privado que el sector público, porque el porcentaje de gente que tiene obras sociales y medicina prepaga es muy alto. Entonces, toda esa gente va primero a los sanatorios privados, y entonces está un poquito más aliviado el sector público. En Provincia de Buenos Aires eso pasa un poquito menos y en el interior no pasa, entonces el hospital público tiene que resistir todo. Y además ahí hay problemas estructurales en el interior, muchas provincias tienen camas, tienen respiradores automáticos, pero no tienen gente especializada en terapia intensiva para manejar esos aparatos. Entonces, es lo mismo que ustedes me den a mí un automóvil último modelo y yo no sepa manejar, no me sirve de mucho. Entonces, hay que ser muy conscientes de los riesgos que estamos corriendo, que no han pasado y que debemos tratar con seriedad. Y que la verdad acá no está en juego la libertad de la gente, todo el mundo es libre, pero la primera condición para ser libres es estar vivo.

PERIODISTA.- Ahora, teniendo en cuenta justamente los datos que se vienen dando, ¿no considera que pudo haber sido un error anunciar una flexibilización en la Provincia y en la Ciudad de Buenos Aires de estas características? Porque teniendo en cuenta que íbamos con cada vez una mayor cantidad de casos diarios, se decidió una mirada contraria si se quiere, ¿cuánto influyó lo social en esta decisión y lo político?

PRESIDENTE.- Hay un dato de la realidad ahí y es que la gente no estaba respetando la cuarentena, ese es un dato de la realidad, hubo un momento en que la gente dijo “yo salgo igual”. Y la verdad es que uno tampoco tiene un policía para cada esquina, para mandar a la casa al que salió. La gente se relajó y se relajó equivocadamente, yo insisto en este punto. El que cree que este problema pasó, no pasó nada, no pasó nada. Estamos en el peor momento. También es cierto que desde el primer día nosotros avisamos, que teníamos que aplanar la curva todo lo que pudiéramos, para poder construir hospitales, dotarlo de respiradores, camas de terapia intensiva. Bueno, eso lo hicimos, multiplicamos por dos esa cantidad en un sistema que está virtualmente destruido porque hagamos memoria que, en los cuatro años precedentes, el Gobierno hasta había eliminado el Ministerio de Salud. A mí me impresiona cuando escucho hablar a los responsables de esa época y darnos consejos, pero la realidad es que nosotros aprovechamos ese aplanamiento para prepararnos, nos preparamos, tenemos ahora capacidad de respuesta y sirvió para mucho la cuarentena en ese sentido, pero también siempre dijimos es que lo que nosotros necesitamos es que cuando la curva vaya para arriba, podamos atender a todos. Esto que está pasando estaba dentro de lo planificado. Obviamente quisiéramos que sea menos, quisiéramos que haya menos fallecidos, pero esto lo esperábamos, no es que es inesperado para nosotros, estaba dentro de lo proyectado, esto inexorablemente iba a pasar. Lo que pasa es que, si nos cuidamos más, no pasa o pasa a menos velocidad.

PERIODISTA.- Claro, ¿Y de la vacuna rusa hay algún tipo de información?

PRESIDENTE.- No conozco más de lo que ustedes mismos deben haber leído en los diarios, no conozco más. Ojalá sea así, ojalá sea así, porque para el mundo sería una gran solución, ojalá sea así.

PERIODISTA.- Presiente, y en relación a todo lo que tiene que ver con la economía post pandemia y el acuerdo al que se llegó, estuvo hablando el Ministro de Economía y planteó que el 2021 va a ser un buen año ¿Cuál es su expectativa con respecto a lo que viene?

PRESIDENTE.- Yo en eso soy muy cauto, tengo datos que nos alientan, como lo alienta Martín, pero soy muy cauto, soy muy cauto porque está el mundo dado vuelta, porque me parece que el mundo cuando esto pase va a barajar y dar de vuelta. Teníamos un Banco Central europeo que ponía el límite (salto de audio) por ciento, (inaudible), y ni quería subsidiar a nadie y ha tirado billones de euros para reactivar la economía europea. Y teníamos a Trump que no quería saber nada con subsidiar la industria, y ahí lo tienen tirando plata permanentemente al mercado. Entonces, me parece que va a haber un barajar y dar de vuelta, y vamos a ver dónde vamos a estar parados nosotros cuando vuelvan a repartir las cartas. Pero creo que todo indica, hay algunos indicadores que el mundo reconoce. Por ejemplo, dicen que la Argentina es uno de los países que más ha preservado el empleo con el ATP, y eso nos da cierta tranquilidad, porque eso lo que nos permite es pensar que en el momento en que se vuelva a producir, todo se pone en marcha rápidamente. El segundo dato que nos alienta, es que somos uno de los países que más ha cuidado a la pobreza, a los pobres, a los sectores más frágiles de la sociedad. Eso también nos da una gran tranquilidad. Hagan memoria, cuando todo esto empezó, que los agoreros de siempre preanunciaban saqueos, cosas que no pasaron, y no pasaron por (inaudible) , solo por eso.

PERIODISTA.- Y de cara lo que viene, muchas veces se habló de repensar el mundo que se viene, ¿con qué modelo imagina a la Argentina en el nuevo mundo que se viene? Que es una discusión que se va a dar a corto plazo indudablemente, cuando empecemos a pensar la saluda y salgamos un poco del ojo de la tormenta en la que estamos hoy, ¿no?

PRESIDENTE.- Bueno, eso es una discusión un poco más filosófica y contrafáctica. Yo creo que el mundo tiene que darse cuenta cuán frágil era el sistema económico que había diseñado. Si el mundo no advierte eso, entonces estamos en un problema. En el 2008, explotó la burbuja hipotecaria y con esa explosión lo único que se vinieron en banda un montón de bancos, un montón de empresas. Y yo pensé que el mundo había entendido, que este juego del capitalismo financiero era muy peligroso, y muchos creímos lo mismo, pero nos equivocamos, siguieron haciendo lo mismo, tomaron aire y siguieron haciendo lo mismo. Yo creo que ahora es un poco lo mismo, ¿no? De repente aparece un virus imperceptible a la vista humana, y tira el sistema económico como quien sople o tira a un castillo de naipes. Nosotros estamos muy preocupados por ver las listas de muertos y enfermos y no nos damos cuenta, si lo viéramos, lo larga que es la lista de empresas que han quebrado y de cómo han caído los bonos de las grandes potencias del mundo. Si el mundo sigue apostando a este capitalismo, no tiene mucho sentido, si el mundo no revisa sus modos de producción que genera una fuerte concentración de ingresos en pocos y la distribución de la pobreza en millones de seres humanos, esto no tiene solución, si el mundo no revisa el cuidado del medio ambiente, si no entiende lo que pasó, si no entiende que las condiciones ambientales mejoraron no el día en que los humanos encerramos a los animales, sino el día que los humanos nos encerramos a nosotros mismos, esto no tiene solución. Yo me acuerdo en la última discusión de París sobre medio ambiente, se habló de la necesidad de reducir el uso de combustibles fósiles, y las grandes potencias del mundo pusieron el grito en el cielo, diciendo que si hacían eso el PBI mundial podía caer alrededor de cuatro puntos. No lo hicieron, vino el virus y el PBI mundial se cayó diez. Y mientras nos pusimos en cuarentena mejoró el aire, mejoraron el agua, dejamos de contaminar, simplemente. Entonces, me parece que son todas cosas que yo cada vez que hablo en los foros, donde me invitan, lo planteo, son cosas que nos deberían hacer reflexionar para el futuro. No tiene mucho sentido un capitalismo que apuesta financieramente, apuesta es la palabra exacta, que puede aumentar sus fortunas con mucha facilidad a partir de esas apuestas, pero que puede derrumbarse toda esa riqueza en contados minutos. No tiene mucho sentido. El mejor capitalismo era el capitalismo que invertía, producía y daba trabajo, ese era el mejor capitalismo. Capitalista, siempre digo yo, fue Ford, ¿no? Que un día se puso a hacer un producto suntuario como un automóvil, destinados a muy pocos neoyorquinos, y un día se preguntó “¿Por qué los que trabajaban en Ford, n pueden tener un auto?”. Y empezó a hacer autos en serie, a abaratarlos, y ese día permitió que el auto llegue a millones de personas. Y ese es el mejor capitalismo. El capitalismo se deprimió, se demacró, el día en el que el gerente financiero en una empresa fue más importante que el gerente de producción. Entonces, todas estas cosas, ustedes dirán tipo se me puso a filosofar esta mañana, pero la verdad son las cosas que me pregunto, son las cosas que me pregunto, ¿habremos aprendido? ¿Estaremos haciendo bien lo que nos pasó? En la Argentina, donde tenemos más del 60 por ciento de la población concentrada en grandes centros urbanos y tenemos un territorio basto e inexplotado, ¿no tenemos que pensar en volver a cierta ruralidad, y generar la infraestructura necesaria para que la gente vuelva al campo a producir y a dar riqueza, y esa gente no tenga que al ir al campo prescindiendo de la luz, del gas o de internet? ¿No tendría que preguntarnos en hacer un plan que piense en eso? Porque esos son los desafíos a los que nos sometió la pandemia. Finalmente, hubo un montón de gente que vino de esos campos, a hacinarse en la Ciudad, y muchos terminaron contagiados, y muchos terminaron muertes, en estos centros urbanos. Y en el campo, ese riesgo era mínimo. Por eso digo me parece que debemos pensar mucho las cosas para el futuro, es una muy buena oportunidad para repensarlo.

PERIODISTA.- Quería consultarle cómo veía con perspectiva la negociación del Fondo Monetario Internacional, Guzmán habló el fin de semana y dijo que va a ser una negociación que va a llevar meses y que va a ser dura, porque hay muchos intereses geopolíticos, más allá de una buena sintonía con Georgieva. Usted, ¿Cómo lo ve?

PRESIDENTE.- Tengo una mirada arecida a la de él, igual creo que yo tengo una diferencia con Martín y es que yo no soy economista, y tengo una mirada menos económica de la situación, pero me parece que estamos en un momento donde todo está en discusión. O sea, ya los dogmas del Fondo se cayeron a pedazos, y hemos visto que se cayeron a pedazos. El Fondo nos acompañó a nosotros marcando la sustentabilidad de la deuda, nos acompañó a nosotros diciendo que no podemos hacer ajustes, acompañó a muchos países del mundo diciendo que tenían que revisar los acreedores privados las deudas que esos países tenían con ellos. Digo, me parece que el mundo ha cambiado. Yo he hablado con líderes mundiales como Macron y Merkel, que tienen miradas muy parecidas a mí, sobre lo que le pasó al capitalismo y sobre lo que pasó al medio ambiente. Yo debo condesar que tengo cierta expectativa de que podamos entender y aprender de lo que nos ha pasado como humanidad. Las pandemias tienen eso, tienen esa cualidad, tienen la triste cualidad de llevarse vidas, tienen la triste cualidad de dejar al descubierto lo miserable de las almas, y hay almas solidarias y almas miserables, pero hoy en día creo que la pandemia ha dejado al descubierto las dos cosas, la importancia del alma solidaria y lo insoportable del alma miserable.

PERIODISTA.- Ahora, siempre está sobre la mesa que la discusión con el Fondo va a ser dónde ajusta Argentina, ¿cree que esta vez va a ser distinto respecto a esto? Porque uno se ha cansado de escuchar “el Fondo es distinto” y en esta oportunidad no es la excepción respecto a esto que el Fondo acompañó respecto a sostener que la deuda argentina no era, valga la redundancia sustentable en el tiempo y demás. Pero siempre la respuesta que ofrece el Fondo suele ser bastante, bastante, similar en todos los países, y es ajuste sobre las jubilaciones, ajustes sobre el gasto social y demás ¿Por qué sería distinto esta vez?

PRESIDENTE.- Si el Fondo dijo que la deuda no era sostenible, tal como estaba, era porque decían que Argentina no tiene dónde sacar los recursos, eso es lo mismo que decir que Argentina no tiene de donde ajustar, y eso es una lectura correcta. Yo hablé por primera vez con Kristalina Georgieva cuando todavía era candidato, y yo le advertía a ella, que yo le había dicho al Fondo a la persona que mandaron, que era toda una locura lo que habían hecho, y que era más locura seguirle prestando dinero a Macri, porque ese dinero se iba a fugar. Y entonces, le conté mi anécdota con Kohler, él era el Director Ejecutivo del Fondo, por el año 2004, 2005. Lavagna discutía con el equipo económico las cuestiones económicas del acuerdo con el Fondo y a mí me tocaba revisar las cuestiones contractuales con Kohler. Y eran años donde el Fondo nos pedía tres cosas fundamentalmente, nos pedía que privaticemos la banca pública, nos pedía que liberemos las tarifas y nos pedía un superávit fiscal de tres puntos, y que no tomemos la obra pública como inversión sino como gasto, lo que influía mucho en el cálculo del déficit fiscal. Y yo me opuse a las 3 cosas, y les dije no, no, no podemos, no podemos, era lo que Kirchner me había pedido que hiciéramos, nada más. No podemos, no podemos, no podemos y en un momento lo mire a Kohler y le dije “mire, usted viene de un país que es Alemania, que no tiene mucho que ver mucho con nosotros, tienen otra historia, tiene otra idiosincrasia, tienen otra disciplina, tienen otra realidad, ustedes no tienen los bolsones de pobrezas que tenemos la Argentina”, que en ese momento la pobreza era 57 por ciento. Y le dije “yo le pido que nos deje hacer las cosas como nosotros decimos, que yo le garantizo que si hacemos las cosas como nosotros decimos usted va a cobrar mucho antes”. El tipo se quedó callado, me miró, estiró la mano y me dijo “listo”.

PERIODISTA.- ¿Se viene una discusión similar?

PRESIDENTE.- Y dos años, dos años después, le pagamos toda la deuda al Fondo y nos liberamos de las comisionalidades del Fondo. Le conté está historia a Kristalina Georgieva, porque lo que le estaba diciendo es no estoy en condición de aceptar ninguna condicionalidad, no estoy en condiciones porque la Argentina no está en condiciones. Lo que yo le pido es que confié porque nosotros no podemos aceptar condicionalidades que nos exijan ajustes, pero sabemos que debemos cumplir nuestras obligaciones, que era lo que sabíamos con Néstor. Y por eso con Néstor fue la primera vez que hicimos sostenible la deuda y ahora es la segunda vez. Y yo creo que ella lo entendió, ella es una mujer que tiene una mira muy especial sobre la economía, y cada vez que hablé con ella, porque después hablé muchas veces con motivo de la (salto de audio) de los acreedores, siempre le recordé esa anécdota, siempre. Yo creo que ella sabe que el día que (inaudible) a decir, no insistan con el ajuste porque a aquellos ya les fue mal, así que empiecen por otro lado.

PERIODISTA.- Venimos viendo con preocupación distintos casos de violencia institucional y fundamentalmente venimos siguiendo muy de cerca, por supuesto, el caso de Facundo Astudillo Castro. Ahora la Fiscalía Federal de Bahía Blanca pide investigar a la Bonaerense por irregularidades, usted se refirió a este caso y pidió garantizar la investigación. La pregunta es cómo ve la investigación, si confía que puede llegar a buen puerto, me refiero a encontrar a Facundo.

PRESIDENTE.- Yo quiero que lo encontremos, necesitamos saber que pasó y si alguien fue irresponsable de algún acto ilícito, tiene que cargar las consecuencias. Yo estoy en contacto con la madre de Facundo, estoy en contacto con Salinas porque la investigación está en manos de la Policía Federal, estoy muy atento sobre el funcionamiento de la Justicia, porque la mamá de Facundo me advirtió algunas cosas que le preocupaban, y estoy muy atento. En un estado de derecho, la violencia institucional es inadmisible, inadmisible. Así que ahí no hay ningún espacio para la tolerancia, ningún espacio no, no. Yo la verdad soy alguien que valora mucho la vigencia del estado de derecho y cree que en la Argentina es posible que el estado de derecho funcione a pleno, pero para eso hay que corregir cosas, hay que corregir cuestiones en la Justicia, que no tienen que ver con quien es el juez sino cómo funcionan los procedimientos. La verdad que corregir también cuestiones que tiene que ver con el funcionamiento de las Fuerzas de Seguridad y habrá que corregir también cuestiones que tiene que ver con el funcionamiento del sistema penitenciario. Son todas cuestiones que hacen a la calidad del estado de derecho y sobre lo que hay que trabajar. Y hay que ser inflexibles. Cuando yo vi situaciones de abusos en el Chaco puse el grito en el cielo, cuando lo vi en Tucumán puse el grito en el cielo, cuando lo vi con Facundo me ocupé, es un caso un poco más complejo por el tiempo que ha pasado y porque hubo un mes que es una suerte de limbo en el tiempo, que no sabemos que paso, pero necesitamos saber del caso sin ninguna duda. Su madre sabe de mí compromiso con ella, para que descubramos que fue lo que paso.

PERIODISTA.- Presidente, las últimas de verdad, me anoté tres nada más, pero me quedan 130.

PRESIDENTE.- Hace dos horas que me venís diciendo, Juan, que son las últimas. Tenés que redefinir el concepto de última.

PERIODISTA.- Es el segundo semestre ¿Qué análisis hace de la discusión pública que se viene dando entorno a la Reforma Judicial? Yo ayer decía en la televisión que viene medio bajo el debate en cuanto a los argumentos, que no se están discutiendo ideas o formas de transformar la Justicia, sino más bien cayó en la grieta e inmediatamente quedó en una situación de si se aprueba la Reforma Judicial, va a ser garantizar la impunidad de Fulanito, de Mengano. Y del otro lado, diciendo mantengamos todo igual porque sino nos van a acusar de lo otro. ¿Cómo lo viene viendo respecto a esto y cómo analiza que Juntos por el Cambio, la principal fuerza opositora, ya haya dicho que no se va a prestar al debate?

PRESIDENTE.- Dijo que no se va a prestar al debate por vía virtual, con lo cual espero que en algún momento den el debate. Esta es parte de la discusión hipócrita de la Argentina, simplemente, hace décadas que venimos viendo la decadencia de la Justicia Federal de la Argentina, décadas. Y el día que llegamos y hacemos una propuesta seria, que ha tenido en cuenta lo que pasa en la Justicia Federal Penal, lo que pasa en el contencioso administrativo, civil y comercial, y lo que pasa en la Justicia Federal del interior del país, y armamos un proyecto global para reconvertir la Justicia Federal, deciden no discutirla porque no les gusta una condición que no tiene nada que ver con esta Ley. Y la verdad es que yo estoy asombrado, estoy asombrado, sinceramente lo digo, estoy asombrado, porque la Argentina necesita tener una Justicia que funcione bien, y me he puesto todos los límites que encontré para que los jueces federales que sean nombrados no puedan ser manipulados por mí, ni por ningún Presidente. Por primera vez, los subrogantes tienen que tener el acuerdo de las dos terceras partes del Consejo de la Magistratura y el acuerdo del Senado, con lo cual yo no puedo nombrar ningún subrogante que me guste. La realidad hemos puestos además normas de conducta a los jueces, por si algún juez no se enteró de lo que no debe hacer y lo que no debe tolerar, se entere. Me parece que el proyecto es un proyecto que por ahí es mejorable, por ahí es perfectible, no yo soy un negado en ese sentido, pero me parece insólito que no lo quieran tratar, porque además si alguien se beneficia con este proyecto es precisamente el Gobierno que dejo el poder, ¿saben por qué? Porque con el proyecto y yo el Presidente públicamente, les garantizo que nadie puede hacer con ellos lo que hicieron hasta ahora con nosotros. En verdad deberían estar agradecidos a eso, a que yo diga no quiero más detenciones arbitrarias, no quiero más manipulación de jueces, no quiero más sacar del juzgado a… para poner en la Cámara a mí amigo el juez sin que pase el concurso, si que el Senado intervenga. No quiero más nada de eso. Ahora, incomprensiblemente dicen que eso es manipular la Justicia, es insólito, dicen esto beneficia a Cristina, no tengo la menor idea en que la beneficia. Leo, releo y recontra leo y no encuentro en que la beneficia, no lo encuentro. Me dicen lo que pasa es que en la comisión esta Beraldi, yo quiero aclarar conozco a Beraldi más de 30 años, es un abogado igual que Carlos Arslanian, extraordinario y académicamente muy reconocido. En el año 2003, cuando pensamos con Gustavo Béliz en reformar la Justicia Federal y no lo logramos, llamamos a dos personas para que nos ayudaran. El proyecto no salió, pero todos añoraban aquel proyecto, todos los que hoy son oposición decían que lástima que no salió aquel proyecto, ¿saben quiénes fueron los dos convocados para ayudarnos a hacer el proyecto?

PERIODISTA.- ¿Quién?

PRESIDENTE.- Beraldi y Arslanian. Resulta que Beraldi es un problema porque es el abogado de Cristina, pero también es el abogado del Ministro de Educación de Macri que está acusado de las escuchas ¿Cómo se entiende eso?

PERIODISTA.- Yo desconocía ese dato, la verdad.

PRESIDENTE.- ¿Cómo se entiende eso? Pero yo digo todas estas cosas, es un abogado y los abogados atienden gente que tienen problemas y los convocan.

PERIODISTA.- Si, y el Consejo no es vinculante además, digo en tal caso para dar otra discusión.

PRESIDENTE.- Entiendo lo que el Consejo proponga, y tiene 90 días largos para hacerlo, en el caso de que yo acepte todo lo que me propone, serán leyes que tienen que ir al Congreso, no son cosas que yo resuelvo por decreto. La realidad es que hay sólo una vocación clara de confundir a la gente, de decirle a la gente que todo esto está armado para lograr la impunidad de Cristina, de que todo esto está hecho para manipular la Justicia. Ellos piensan que nosotros somos iguales que ellos y no somos iguales que ellos. Y yo llevo 35 años enseñando a los alumnos de la Universidad de Buenos Aires, siguiendo las enseñanzas que me dejaron personas como el Bebe Righi o García Lupo, la importancia de preservar el estado de derecho, no voy a llegar a ser Presidente para borrar eso con el codo, de ningún modo.

PERIODISTA.- La última, juro que es la última. Impuesto a las grandes fortunas o contribución a las grandes fortunas, ¿qué paso con el proyecto?

PRESIDENTE.- Eso está trabajándose.

PERIODISTA.- ¿Hace cuánto?

PRESIDENTE.- Eso se está trabajándose. Lo que pasa, Juan, es que tenés que entender que también hay tiempos y tiempos Legislativos, pero eso se está trabajando y está avanzando. Lo está trabajando Máximo y Carlos Heller juntos, y eso va a salir. Yo estoy seguro que va a salir, que solamente hubo otras urgencias, ahora están tratando la ampliación del presupuesto, están tratando el tema de la moratoria, eso ya va a salir.

PERIODISTA.- Bien, es mí ansiedad entonces.

PRESIDENTE.- Es ansiedad, es ansiedad.

PERIODISTA.- Presidente, le agradecemos de verdad mucho por tomarse un rato para charlar con nosotros esta mañana, ¿estaba caminando, estaba haciendo ejercicios?

PRESIDENTE.- Sigo caminando, sigo caminando a la mañana.

PERIODISTA.- Porque hay gente preocupada por la agitación. Entonces no, sigue haciendo ejercicio, mientras habla con nosotros,

PRESIDENTE.- Quiero aclara, para que la gente entienda, que yo primero voy a paso rápido, y segundo dos vueltas a la Quinta son cinco kilómetros con lo cual es un trecho, que este momento estoy culminando, pero son cinco kilómetros casi a un trote lento si lo querés, es un poco agita. Bueno, elegí me escuchás agitado o no me escuchás.

PERIODISTA.- No, es preferible escucharlo agitado, desde luego ¿Está haciendo ejercicios, empezó finalmente con la dieta que había prometido?

PRESIDENTE.- Me obligaron a hacer dieta, lo hago a desgano, pero sé que tengo que hacerlo, porque como muchos de nosotros la cuarentena nos tuvo encerrados, algunos eliminan la ansiedad fumando, yo elimino la ansiedad comiendo. Así que estoy tratando de calmar mí ansiedad, esa que te hace preguntar cien veces la última pregunta, en mí se convierte en comer algo dulce. Así que estoy cuidándome y ya empecé la dieta, y esto igual lo hago todas las mañanas, la caminata de los cinco kilómetros lo hago todas las mañanas.

PERIODISTA.- Está muy bien. Presidente, muchas gracias de verdad por tomarse un rato para hablar con nosotros, no habíamos tenido oportunidad de charlar en esta radio y habíamos charlado mucho en la previa a la asunción, y recuerdo que la última nota antes que usted fue candidato nos contó algo que pasó, que era que veía la serie Veep.

PRESIDENTE.- Sí, extraordinaria, ya terminó.

PERIODISTA.- Que tiene una trama muy particular, en realidad desde la política.

PRESIDNETE.- Claro. Es bastante realista, lamentablemente bastante realista, porque para que la gente entienda cuenta la historia de una Vicepresidenta, muy poco capacitada, que repentinamente el Presidente renuncia y se tiene que quedar a cargo de la presidencia. Y muestra cómo funciona, cómo funciona realmente la política, los personajes de la política, el obsecuente, el crítico, el que habla con uno y con otro, el que manda a la prensa y genera líos. Todos esos personajes están, es una serie hecha en tono de comedia.

PERIODISTA.- Le iba a preguntar si esos personajes están en el Gobierno, pero mejor no.

PRESIDENTE.- Están en toda la política, están en toda la política. Eso si el secreto es saber conocerlos, todos tienen, como todos los seres humanos, tienen partes débiles y tienen fortalezas, tiene virtudes y tienen defectos. El secreto del que manda, del que es jefe es potenciar las virtudes, no potenciar los defectos.

PERIODISTA.- Bien. Presidente, muchas gracias por la comunicación. Un abrazo.

PRESIDENTE.- Abrazo muy grande y gracias a ustedes.

PERIODISTA.- Era Alberto Fernández, el Presidente de la Nación que pasaba en Crónica Anunciada.