Palabras del presidente Mauricio Macri en el cierre del 55 Coloquio de IDEA, por teleconferencia

  • Compartilo en redes :

PALABRAS - POR TELECONFERENCIA - DEL PRESIDENTE DE LA NACIÓN, MAURICIO MACRI EN EL CIERRE DEL 55 COLOQUIO IDEA, DESDE LA PROVINCIA DE CORRIENTES.

GASTÓN REMY.- Acá estamos haciendo alarde de la tecnología: en primer lugar agradecerle por la participación. Quiero recordar que el presidente Macri ha estado en cada uno de los cierres del Coloquio IDEA, desde que es presidente; entendemos que esta vez con la intensidad y las complicaciones de la campaña se ha hecho un esfuerzo muy grande para que pueda estar presente, a través de la videoconferencia, así que el agradecimiento muy grande en ese sentido. Este es el cierro formal del Coloquio y muy brevemente, presidente Macri, para ponerlo en contexto, estos han sido días donde el Coloquio – una vez más – se convierte en un espacio plural, en un espacio de convocatoria, en un espacio de desafíos y de nuevas miradas, por supuesto haciendo epicentro en el empresariado argentino, pero con la participación de muchos y variados sectores de los sindicatos, la academia, la justicia, de los legisladores. Recién tuvimos también a los gobernadores, incluso también pensadores y académicos que nos acompañaron y quizás para destacar fue la sensación y el acompañamiento, en general, de pensar que Argentina sigue necesitando encontrar acuerdos y miradas en común para buscar su salida y encontrar definitivamente el camino del desarrollo.

Alrededor de los temas centrales – como usted conoce – hay tres ejes, en los cuales nos venimos manejando, desde hace varios años, que tienen que ver con la calidad institucional del país; que tienen que ver con la competitividad y que tienen que ver con la integración social, con todo lo que eso significa. Así que en ese contexto, le damos la palabra para que comparta usted sus reflexiones y podamos cerrar – formalmente este coloquio. Acá estoy junto a Federico Procaccini, que fue el presidente del Coloquio 55.

PRESIDENTE.- Bueno, otra vez buenas tardes a todos, gracias una vez más por esta invitación, lamento no poder estar ahí, me encantaría pero estoy con estas marchas del Sí, se puede, y hoy me toca en Chamigo, y hay más de 30 mil personas esperándome ahí, en la costanera, para ratificar esta vocación por el cambio. Esto que está pasando es algo maravilloso y único, demuestra que hay una energía nueva en nuestro país y espero que el Coloquio haya sido, de vuelta, tan útil y constructivo como siempre tratando de unificar visiones del sector privado. Recién escuchaba el cierre de la Gobernadora, un sector privado que tiene que actuar cada vez más en conexión, en la asociación con el sector público, que es lo que hemos intentando, en estos cuatro años y que creo que hacia el futuro tenemos que reafirmar. Lo que siento es que, justamente, en línea con lo que hablaba, en estos cuatro años, por más que sabemos que nos faltan muchas cosas que resolver, muchas que han pesado mucho en la vida diaria de los argentinos, en el último año y medio, pero hay cosas de las cuales tenemos que estar orgullosos. Una de esas, es la que ustedes citaron, la mejora de la calidad institucional, que hayamos podido volver a dialogar el sector público y el sector privado con la verdad sobre la mesa, con estadísticas reales, que tengamos un gobierno que le rinde cuentas, un gobierno que no sólo abre puertas internamente, sino que abrió puertas con el mundo y ese abrir puertas ya permitió nuevas asociaciones que tienen muchas perspectivas de futuro. Y, en ese camino, claramente todavía nos falta – como ustedes dijeron – un acuerdo más profundo, lo que yo planteé en el debate anterior sobre cómo logramos tener una economía ordenada, estable, después de tantas décadas, 80 años, en el caso de la inflación y la falta de equilibrio fiscal, que nos han impedido crecer, generar empleo, reducir la pobreza, porque los sectores a desarrollar están claros, hemos podido avanzar a pesar de esta falta de equilibrio macroeconómico, por ejemplo, en el tema energético, donde vos dominás mucho el tema, Gastón y muchos otros que tiene que ver y están orientados a la exportación, pero necesitamos tener moneda, necesitamos tener crédito, necesitamos tener estabilidad, previsibilidad y eso requiere un acuerdo más profundo. Así que yo apuesto a que, después del 10 de diciembre, nuestros opositores empiezan a hablar de las mismas temáticas y las ponen en sus plataformas, esta vez realmente sí podamos llegar a este acuerdo, que después de cuatro años, más allá de los intentos no hemos podido y finalmente eso nos llevó a estar demasiado frágiles, expuestos y dependiendo del crédito externo y a partir, de abril del año pasado, eso nos provocó esta crisis económica, que devino, de vuelta en más inflación, de vuelta en más recesión y lamentablemente más pobreza, que sigue siendo para mí el objetivo central, que tenemos que tener como gobierno y los argentinos, en general, quieren reducir la pobreza e igualar las oportunidades.

FEDERICO PROCACCINI.- Muchísimas gracias, señor presidente, durante ya casi dos días y medio surgieron un montón de conclusiones; una de ellas – al arranque – fue con la gobernadora Vidal, que hablaba de que el futuro es sin grietas; también Fernández Meijide, que hablaba de ir celebrando los procesos y las pequeñas mejoras y esto, que también usted decía, que todavía los consensos y los acuerdos no lo hemos logrado. Entonces a mí me gustaría preguntarle, si es posible, ¿un balance de estos últimos cuatro años, o este último año, en términos de qué deberíamos cambiar o qué usted debería cambiar o qué autocrítica se hace de estos últimos años para lograr estos consensos reales y profundos, este diálogo transparente para que sin grieta podamos construir un único país a este enfoque de desarrollo?

PRESIDENTE.- Creo que realmente, visto en retrospectiva, yo subestimé la dificultad de lo que es erradicar la inflación, en nuestro país, y lograr consensos alrededor de eso, porque hemos visto muchos discursos alrededor de la importancia del equilibrio macroeconómico, pero a la hora de la verdad, en los debates en el Congreso, siempre ha sido muy difícil llegar a acuerdo para bajar el gasto y ha sido demasiado fácil encontrar que hay acuerdos para aumentar impuestos. Y justamente en la Argentina – después especialmente del gobierno anterior – la carga tributaria creció más allá de lo que sostiene el desarrollo de un sector privado y lo que puede aguantar la clase media argentina, con lo cual espero que esta vuelta, estoy más convencido, de que creo que hay una madurez no sólo un aprendizaje del gobierno, también siento que hay un aprendizaje en varios sectores de la oposición, en varios gobernadores que ahora muchos de ellos, debido a una política mucho más federal que hemos practicado nosotros devolviéndoles ingresos de coparticipación a los gobiernos provinciales ellos tienen un equilibrio y ven lo que significa el equilibrio en ir pudiendo mejorar la calidad de la gestión; la calidad del servicio público a sus contribuyentes, a sus habitantes. Entonces, creo que hoy tenemos un espacio – pasada la elección – para lograr ese acuerdo y la verdad que ese va a ser el primer foco, porque necesitamos tener claro de que no podemos seguir, ya otros cien años, con déficit fiscal, por parte del Estado; 77 de los 100 años, como planteé en el debate, entonces ya son números que nos golpean y que nos demuestran que han llevado al atraso y la pobreza. Entonces, yo creo que se va a abrir un espacio – pasada la elección – soy optimista de eso, así como soy optimista de que el 27 vamos a ir al balotaje y vamos también a ganar la elección, porque noto que ya somos cada vez los argentinos que nos damos cuenta que trayendo los problemas del pasado a los problemas que no hemos resuelto todavía no vamos a mejorar, sino que vamos a empeorar. Así que creo que estamos todos para ratificar el rumbo, trabajar más juntos que nunca y, de verdad, resolver los problemas profundos que arrastramos, hace tantos años, que son los que detienen al crecimiento, porque, en estos años hemos visto que podemos crecer con la energía, podemos crecer con la agroindustria, podemos crecer con la industria tradicional, podemos crecer con la economía del conocimiento. Hemos sacado una ley, con unanimidad absoluta, que potencia y va a multiplicar lo que hemos hecho en estos años; podemos crecer con el turismo y estamos creciendo con el turismo, entonces lo que necesitamos es ese equilibrio macroeconómico, al cual ya de por sí nos acercamos, porque hoy redujimos el déficit que heredamos, en más de un 80 por ciento; hoy exportamos más de lo que importamos; hoy ya bajamos 3 puntos de impuestos y hay que seguir bajándolos. Me asusta cuando escucho a algunos que proponen volver a aumentarlos, especialmente gravar a la exportación que es lo que nos desarrolla y nos equilibra a futuro, es un impuesto del cual tenemos que salir definitivamente.

Entonces creo que, hoy, estamos mucho más cerca para que ese acuerdo sea posible, y noto en la conversación, que tengo con muchos de los dirigentes, de que hay un ambiente para lograr ese consenso. Obviamente hay que terminar el proceso elector que – lamentablemente – como ustedes saben el día 12 de agosto, la posibilidad de que volvamos al pasado fue un castigo muy grande, por parte del mundo, hacía la Argentina porque aumentó el dólar el 30 por ciento; se destruyó la Bolsa; se multiplicó el riesgo país y eso nos castigó aún más de lo que ya veníamos tratando de recuperarnos, pero estoy convencido de que así como pasó, en el 2015, en el 2017, una vez que confirmemos los argentinos que no volvemos al pasado y vamos hacia el futuro se va a restablecer un cierto nivel de confianza, vamos a volver a ver que se nos abra la posibilidad de financiar el crecimiento. Por supuesto, tenemos que responder – llegando a esos consensos – que garanticemos que, esta vez, si vamos a tener esos equilibrios macroeconómicos, que se han logrado en tantos países alrededor nuestro y ahí sí el crecimiento, de la Argentina, yo creo que estará garantizado por muchos años, porque hoy ya tenemos bases diferentes. Hoy tenemos un país más moderno, un país con energía, un país con infraestructuras, que ya hemos hecho muchas, pero ya tenemos claras todas las que tenemos que hacer y vamos a multiplicarnos en la construcción de esa conectividad física y virtual, que cambia un país. Porque un país para poder crecer tiene que estar conectado y por eso hemos puesto mucho eje en el desarrollo de nuestras rutas, las autopistas, los trenes, los aeropuertos, los puentes, la hidrovía, son todas cosas que hoy ya han mejorado y van a mejorar mucho más y eso es empleo, eso es federalismo, eso es desarrollo.

GASTÓN REMY.- Sabemos que tiene poco tiempo presidente y que está yendo camino a un acto electoral, como habíamos dicho esto no pretende ser una entrevista ni mucho menos, sino la oportunidad de hacer un cierre formal del Coloquio con su presencia, volver a agradecerle por la oportunidad, por el acompañamiento en los cierres de años anteriores y en las actividades de IDEA y decirle si quiere hacer alguna reflexión o un comentario para esta audiencia tan diversa de empresarios, que están acá presente o para la sociedad, sabiendo que el Coloquio es una caja de repercusión.

PRESIDENTE.- Decirles que, tal vez, las PASO nos dio la oportunidad de hacer una reflexión más profunda de quiénes somos, qué es lo que queremos, en qué tipo de país queremos vivir, qué valores queremos defender y la verdad que siento que ha despertado algo increíble, en la Argentina. No sé si ustedes han podido seguir, a través de las imágenes, estas marchas, yo creo que las imágenes y los relatos no reflejan estar ahí y sentir latir el corazón de tantos argentinos, que van solos, sin que nadie los lleve a una plaza de su ciudad, o a una ciudad a cientos de kilómetros a las cuales se mueven a expresar cosas tan básicas, pero que son tan fundamentales en la vida de todos los seres humanos: querer vivir en libertad; querer vivir con la verdad; que nadie les diga qué es lo que tienen que pensar o lo qué tienen que hacer, sino que le den la oportunidad de crecer y desarrollarse, a partir del diálogo, del trabajo en equipo y esto es lo que estamos sintiendo, esto es lo que yo siento que está por pasar. Yo sé que hay muchos escépticos, especialmente en el círculo rojo, que ya dieron por terminado todo, aquel día de las PASO, pero yo creo que no, que los argentinos entendimos – e insisto – que volviendo atrás no vamos a solucionar los problemas y los desafíos del futuro, que esto depende de nosotros, que claramente no hemos podido darle la vuelta a una economía que recibimos, todos ustedes saben, ya aislada del mundo, sin energía, en default, sin ni siquiera estadísticas y una inflación reprimida, pero hoy sí hemos avanzado, en las cosas que ya hablamos, ya son bases sobre las cuales vamos a poder crecer, ya el esfuerzo no fue en vano y a partir de acá hay mucho para hacer y progresar y lo más importante es que hay muchos millones de argentinos que lo sienten de verdad y que están saliendo a transmitirlo y lo están contagiando y que va a permitir que esta vez, de verdad, porque estamos en un contexto económico como este a punto de ratificar estos valores en los que creemos y el rumbo que hemos tomado y eso va a significar que estamos cambiando la historia de este país para siempre. No vamos a volver más a la prepotencia, al abuso de poder, ni a la mentira, porque por ese camino – lamentablemente – no se construye nada y yo espero, que después de la elección, más argentinos se sumen, porque como ustedes decían, esto lo tenemos que sacar adelante entre todos y esta confrontación tan extrema no le sirve a nadie, absolutamente a nadie, ni que vuelvan los discursos tan agresivos tampoco le sirve a nadie. Pero yo espero que pasando la elección – retomando y respetando la voluntad democrática – podamos todos trabajar juntos para sacar este país adelante.

Así que estoy muy confiado, muy contento de lo que estamos viviendo, la verdad que es una emoción permanente, es una revolución de esperanzas y expectativas que estoy viviendo por todo el país y estoy seguro que no a ser en vano, que esta vez los argentinos estamos por dar el paso más importante de nuestras vidas.