PALABRAS DEL PRESIDENTE NÉSTOR KIRCHNER EN EL ACTO DE ENTREGA DE CERTIFICADOS DE ALFABETIZACIÓN PARA JÓVENES Y ADULTOS

PALABRAS DEL PRESIDENTE NÉSTOR KIRCHNER EN EL ACTO DE ENTREGA DE CERTIFICADOS DE ALFABETIZACIÓN PARA JÓVENES Y ADULTOS

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Señores ministros del Poder Ejecutivo Nacional y Provincial; autoridades nacionales y provinciales; docentes; alumnos; voluntarios; amigos y amigas: creo que acabamos de presenciar la realización de un acto y la exposición de dos hermanos argentinos que nos han emocionado profundamente a todos, que marca con absoluta claridad lo que pasó y sucedió durante muchos años en esta Argentina y que, lógicamente, es algo que no se puede erradicar mágicamente como quieren algunos, ni con teorías ni con actitudes voluntaristas ni creyendo que lo que nos pasó durante tantos años se puede superar en apenas dos años que vamos a cumplir, partiendo del más profundo de los infiernos.

Lo que acá expusieron los dos amigos, los dos hermanos argentinos, uno de Misiones y otro del Chaco, marca la exclusión, la falta de equidad, lo que se construyó durante tanto tiempo, y también marca la solidaridad que deben tener aquellos que pudieron acceder de alguna forma u otra a la educación, de la misma forma en que tiene que estar la solidaridad del ocupado con el desocupado, no solamente por el marco de la protesta sino por la capacidad para construir un país viable.

La Argentina puede ser un país absolutamente viable, la Argentina muestra que se puede recuperar rápidamente, la Argentina no necesita para recuperarse ninguna de las teorías económicas que nos imponen, sino hacer nuestra propia receta de administración y nuestra propia receta de cómo vamos sacando al país adelante porque lo podemos hacer. Lo estamos haciendo, muchas veces prácticamente solos. Las tutorías y los paternalismos no sirven, sólo sirve la humildad, ser un hombre común, trabajar como uno más, saber que nadie es perfecto, que todos aciertan y todos se equivocan y que en los aciertos que logramos los seres humanos tenemos que encontrar el camino que debemos llevar adelante. Esto para todos aquellos que tienen posturas intransigentes en la sociedad, los que creen que la verdad pertenece siempre a un lado, que no hay una verdad relativa de cada uno y una verdad superadora que nos contiene.

Si los argentinos tenemos humildad, solidaridad y esfuerzo vamos a seguir avanzando. No tengan ninguna duda, vamos a tener hechos que nos conmuevan como los de hoy, donde todos nos sentimos un poco mejor. Yo no quiero ni hablar de cómo se debe sentir un voluntario, un docente que está en esta tarea, que logra sacar de la oscuridad a aquel que necesita la mano para poder comunicarse con el resto de los hermanos y con la sociedad, y como dijo el amigo para pelear por sus derechos y la posibilidad de un trabajo, como él explicitaba tan bien y con tanta claridad. Debe ser un sentimiento tremendo, muy profundo.

Después también, como decía el ministro de Educación, dejar de jugar a la política, a los grupos de presión; a ver si tal hace tal cosa entonces yo tengo que hacer tal cosa, si esto me perjudica o no me perjudica. Yo les digo a todos los que me escuchan por televisión y a ustedes que estoy tan harto de esta mezquindad argentina de ver cómo cada uno queda posicionado, esa desesperación por ver quién se posiciona mejor en cada tema. ¿Queremos hacer una Argentina distinta o seguimos en un individualismo exacerbado que nos lleva a quebrar todas las cadenas de solidaridad y la posibilidad de construir una Argentina distinta? Para construir una Argentina distinta hay que ir dando paso tras paso, lo que destruyeron, se llevaron y saquearon no se recupera de un día para otro. Obviamente ese paso tras paso tiene que ser hecho con un claro sentido de justicia y equidad, un claro sentido de ir mejorando a los que menos tienen, que debe ser la parte central y fundamental de nuestra agenda.

Pero cuidado con aquellas dirigencias corporativas que dicen que defienden a los que menos tienen y lo único que están peleando es ver cómo se posicionan políticamente cuando se acerca una elección. Cuidado, que ya aprendimos varias lecciones de éstas que tanto daño nos han hecho a los argentinos.

Por eso, Ministro, usted está haciendo un esfuerzo grande y vamos a seguir avanzando profundamente en estos temas. Nosotros creemos en la Ley de Financiamiento Educativo. Somos los primeros que habíamos dicho, desde el poder político en los últimos años y décadas en la Argentina, que se debe construir una Ley de Financiamiento Educativo, y se debe hacer conversando, se debe hacer hablando, discutiendo con las puertas abiertas, saber hasta dónde el Estado puede avanzar de cero a uno o de cero a cinco, o de cero a cuatro, o como lo podamos ir logrando, ir avanzando concretamente para financiar la educación. Esto es lo que hay que hacer. ¿Y cómo se recrean las neuronas positivas y cómo se recrea la tarea de generar los hechos?: hablando, dialogando, creando, buscando y sabiendo qué es lo que tenemos y hasta dónde podemos avanzar.

Veo a veces, y me han emocionado profundamente los hermanos que hablaron antes, que en la Argentina hay una tendencia a volver al sentido corporativo tan grande. En tal cosa no hay que meterse, en tal cosa no hay que inmiscuirse, si yo les hiciera caso a todas las cosas que me dicen algunos analistas de la realidad, algunos dirigentes y representantes de las corporaciones, me tendría que ir a barrer la vereda afuera, un Presidente que no exista acá. La verdad que yo no vine para quedarme toda la vida dentro de esta casa, bajo ningún aspecto. Realmente trato de juntarme al sentimiento de mi pueblo, estamos hartos de las presiones corporativas, queremos que llegue la hora de la gente. (Aplausos)

Si quieren seguir cargando sobre esta espalda que sigan cargando, no hay problema, pero va a llegar la hora de la gente, porque yo sé que con ustedes, con los que nos miran, con los millones de hermanos que están de un lado al otro, tomados de la mano, lograremos dar la lección de historia de que la gente de una vez por todas en esta Argentina construye un proyecto político por arriba de las corporaciones. Y si la gente construye un proyecto político por arriba de las corporaciones vamos a estar haciendo un país distinto, si no volveremos a ser dependientes absolutos de las corporaciones que lo único que les importa es defender sus propios intereses. Esta lección ya la hemos aprendido durante muchísimo tiempo. (Aplausos)

Queridos hermanos, muchas gracias por estar aquí, felicitaciones por lo logrado. Creo que ha aparecido un dirigente en potencia hoy, la verdad que el discurso fue brillante, nos dio una lección de realidad, nos puso los pies sobre la tierra y nos marcó que el trabajo, el esfuerzo, la inclusión, la lucha por la equidad, la lucha por la justicia, la lucha contra el olvido, la lucha contra la oscuridad es una cuestión de todos los días. Muchísimas gracias por estar acá. (Aplausos)