PALABRAS DEL PRESIDENTE NÉSTOR KIRCHNER EN EL ACTO DE PRESENTACIÓN DEL PLAN FEDERAL DE SALUD

PALABRAS DEL PRESIDENTE NÉSTOR KIRCHNER EN EL ACTO DE PRESENTACIÓN DEL PLAN FEDERAL DE SALUD

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Señor vicepresidente de la Nación; señores gobernadores; señores ministros del Poder Ejecutivo Nacional; autoridades nacionales y provinciales; señores legisladores; señoras y señores: la profunda crisis que debimos atravesar en los últimos años nos ha dejado enseñanzas pero, a la vez, un largo camino de cuestiones no resueltas y que debemos recorrer. Una política de Estado en salud es una de ellas.

El Estado nacional debe actuar como el gran reparador de estas desigualdades en un trabajo permanente de inclusión y creando oportunidades a partir del fortalecimiento de las posibilidades de acceso a la salud, promoviendo el desarrollo social basado en el esfuerzo y trabajo de cada de uno de nosotros.

Para construir un nuevo modelo sanitario es necesario que el Estado asuma un rol protagónico y eso es lo que estamos haciendo. El sistema de salud en la Argentina aún tiene una enorme fragmentación. Para lograr un sistema integrado y articulado debemos redefinir las responsabilidades de cada actor, coordinar sistemas y brindar soluciones flexibles, porque la salud de los argentinos es un problema de todos.

Tenemos que construir un sistema federal y flexible de salud, mejor regulado, más integrado y más justo, que contemple a todos los sectores y que respete las diferencias regionales y provinciales.

Los argentinos ya no creemos en soluciones mágicas o prodigiosas. Por eso debemos volver a producir salud mediante un proyecto de construcción colectiva.

Para ello pedí hace unos meses la confección de un Plan Federal de Salud que integre los esfuerzos de la Nación y las provincias con el objetivo de brindar más y mejor salud para todos los argentinos, y hoy lo tenemos.

Hoy presentamos un nuevo modelo sanitario, más integrado, con mejor acceso para todos y más orientado a promover la salud y prevenir la enfermedad, que es un objetivo central para nuestro Gobierno.

Este Plan identifica las políticas destinadas a fortalecer la equidad y la calidad de la salud, porque su ausencia se paga con vidas. Este es un trabajo de muchos meses que pretende articular los diferentes sectores de nuestro sistema y las distintas jurisdicciones.

El Ministerio de Salud de la Nación inició un arduo trabajo de consensos sectoriales y transversales en el marco del Diálogo Argentino, Sector de Salud, con organizaciones de la sociedad civil y un sinnúmero de otros actores que asistieron al Gobierno a través del Comité de Crisis y, posteriormente, del Consejo Consultivo.

Toda esta tarea anticipó un hecho central: la comunidad tiene y tendrá un papel protagónico; la salud como derecho requiere de ciudadanos que puedan y quieran ejercer su ciudadanía. Existe un fuerte compromiso en este sentido y las Mesas del Diálogo del Sector Salud son hoy un ejemplo a nivel nacional, provincial y municipal.

Debemos incrementar todos nuestros esfuerzos; los cambios se llevarán a cabo sólo si la ciudadanía está dispuesta a participar activamente de ellos. Se busca ahondar la reconciliación de la política, las instituciones y el Gobierno con la sociedad.

Así, la Nación, las provincias, los municipios, las sociedades científicas, los colegios de profesionales, las asociaciones gremiales, las casas de estudio e investigación, las organizaciones de la sociedad civil, deben acordar periódicamente compromisos de políticas saludables, estableciendo prioridades, definiendo metas y evaluando su cumplimiento.

Es concretar un Sistema Nacional de Salud basado en la construcción de redes de atención y reconociendo su base primordial en la estrategia de atención primaria. Esta estrategia es una vía de compromiso por parte de los gobiernos locales quienes, a partir de ahora, desplegarán acciones de promoción y prevención, desarrollarán políticas saludables, informarán y modelarán conductas.

No sólo se garantizará el acceso a los niveles de prestación de salud básicos y a los medicamentos esenciales, sino que deben alcanzarse de manera progresiva las metas de un municipio saludable integrando las áreas de salud con las de ambiente y desarrollo sustentable. Los hospitales y centros de salud formarán redes en distintos ámbitos con diversos niveles de complejidad y división de tareas, minimizando las ineficiencias y los costos para todos.

El fortalecimiento de los centros de atención primaria y los hospitales públicos son nuestra prioridad. Como ya ha podido apreciarse junto al lanzamiento del Plan Federal estamos transfiriendo a las provincias ambulancias, equipamientos completos, materno infantiles e insumos médicos, verificando que no sólo se trabaja conceptualmente en la planificación del futuro sino que también se comenzó a modelarlo.

Esta manera de planificar que elegimos hoy es una manera de operar el cambio por un método contrario al de las decisiones iluminadas que sustituyen una exclusión por otra. Hoy con la decadencia del modelo economicista de pensamiento único puede reafirmase que la salud es un proyecto de construcción colectiva. Garantizar la igualdad del acceso a los servicios desde La Quiaca hasta Ushuaia es aportar a la formación de una verdadera conciencia e identidad nacional.

Teniendo conciencia de que este plan implica recorrer un largo camino y que no importa dónde estemos nosotros en unos años, necesitamos dar el primer impulso a un plan complejo y de gran envergadura. Nos sentimos contentos de que al empezar estamos haciendo el más grande de los avances.

Finalmente quiero agradecer la permanente colaboración de los señores gobernadores y de los señores ministros de las provincias, con quienes en una tarea conjunta, permanente, de elaboración, de debate y discusión logramos sintetizar este plan que un día soñamos hace muchos meses en la Sala de Situación de la Casa de Gobierno.

También, al cabo de un año de trabajo intenso, quiero agradecer fuertemente a los ministros, a los secretarios, a los responsables de entes, su tarea permanente, sin bajar los brazos, tratando de empezar a reconstruir la fe pública, tratando de reconstruir un modelo de Estado y desde la verdad relativa tratar de reconstruir una propuesta.

Este Plan de Salud está sintetizado también por la opinión de los señores gobernadores que no son de nuestro partido. Como todas las políticas que estamos llevado adelante estamos dispuestos a debatirlo y discutirlo. Queremos que en la Argentina se pueda hablar con seriedad y con responsabilidad; salir de la Argentina del agravio y la descalificación, de las propuestas mesiánicas y de los fines prácticamente fundamentalistas o nihilistas que tienden a perder el objetivo como país. Nuestro proyecto económico, nuestro proyecto social, nuestro proyecto de salud, nuestro proyecto energético, nuestro proyecto de seguridad, nuestro proyecto de educación, nuestro proyecto de defensa -con aciertos y desaciertos- estamos absolutamente dispuestos a debatirlos con todos. ¿Qué más les podemos brindar a los argentinos que la posibilidad de que haya un debate? Pero sobre cosas concretas, qué es lo que hay que hacer con la Argentina. Esto es fundamental, pasa en muchos países del mundo. Nosotros desde el Gobierno proponemos esto permanentemente, no nos van a encontrar descalificando ni agraviando a nadie. Preferimos soportar, el país lo necesita. Ya vimos todas las cosas que nos tocó vivir, que nos tocó pasar.

Por eso señores, a todos ustedes aquí presentes, muchísimas gracias por el acompañamiento durante todo este año, y a los señores ministros y gobernadores también muchas gracias por creer, por pensar, por elaborar, por disentir. Porque algunos por ahí creen que acá hay un esquema de que el Presidente dice y se hace esto. Al contrario, tenemos los ámbitos de debate donde disentimos entre nosotros y esto nos enriquece permanentemente. Sintetizamos nuestra propuesta y necesitamos debatirla con todos los sectores. Lo que pasa es que es muy importante el ámbito para escucharse y el ámbito también que nosotros debemos tener en la Argentina para encontrar propuestas que puedan resolver los temas que esta Argentina tiene que recorrer.

Trabajadores, empresarios, asociaciones de todo tipo, estamos embarcados en esta historia de construir una Argentina que nos contenga a todos. Yo sé que es posible, lo estamos haciendo y lo vamos a hacer. Estamos absolutamente motorizados en este esquema.

Dios quiera que este 25 de Mayo, Día de la Patria, nos retemple aún más el espíritu para seguir trabajando por esta Argentina que necesita aciertos, que necesita que nos equivoquemos lo menos posible y que necesita decisiones, respuestas, acciones y políticas que resuelvan los innumerables problemas que tenemos. Muchísimas gracias.