PALABRAS DEL PRESIDENTE NÉSTOR KIRCHNER EN EL ACTO DE AMPLIACIÓN DE LA POLITICA NACIONAL DE MEDICAMENTOS

PALABRAS DEL PRESIDENTE NÉSTOR KIRCHNER EN EL ACTO DE AMPLIACIÓN DE LA POLITICA NACIONAL DE MEDICAMENTOS

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Señor vicepresidente de la Nación; señores ministros del Poder Ejecutivo Nacional y Provincial; autoridades nacionales, provinciales; señores empresarios; representantes gremiales; señoras y señores: el acceso a los medicamentos es un bien público social, es decir un bien que al igual que la seguridad pública o la educación básica sólo es efectivo para quienes la obtienen si se garantiza su acceso a todas las personas. Ha sido una permanente preocupación de este gobierno disminuir las barreras de acceso. Por eso, primero estamos extendiendo la cobertura de 40 al 70 por ciento y en algunos casos al ciento por ciento de su precio; segundo, estamos incrementando la cantidad de medicamentos cubiertos para los tratamientos de enfermedades crónicas de toda la seguridad social; tercero, continuamos impulsando la prescripción por el nombre genérico de los medicamentos; cuarto, hemos extendido el programa Remediar de provisión gratuita de medicamentos hasta el año 2007 para 15 millones de hermanas y hermanos que están debajo de la línea de pobreza. Ampliamos un nuevo formulario terapéutico para la Seguridad Social, primer paso en la constitución del programa Médico Obligatorio definitivo.

Las obras sociales han pasado por momentos muy difíciles, sin embargo, a pesar de las dificultades se están recuperando y este recupero solidariamente se vuelca de inmediato al bolsillo de los trabajadores. Esta extensión de cobertura presenta sin duda un mejoramiento en el salario de bolsillo de los trabajadores de manera significativa. Las personas pueden progresar individualmente o en conjunto si se les garantiza un mínimo de seguridad humana, que es lo que en las Naciones Unidas definen como la libertad frente al miedo y la necesidad. No hay libertad posible sin seguridad humana, un componente básico de esta seguridad humana es el acceso a los medicamentos.

A diferencia de la noción de ciudadanía el concepto de bienestar o justicia social no implica proveer iguales beneficios para todos, porque las necesidades son diferentes, según edad, composición del grupo familiar, enfermedades, sino igual inversión social ante situaciones comparables. En el caso de los enfermos crónicos se debe evitar por todos los medios la discontinuidad de los tratamientos, porque ello no sólo afecta los derechos de las personas y el bienestar de las familias a las que ellas pertenecen sino porque además implica la necesidad de realizar mayores gastos futuros; la interrupción genera consecuencias que agravan las condiciones del paciente y aumentan los riesgos de contraer otras enfermedades.

Además de la ampliación de la cobertura a la mayor cantidad de medicamentos y los precios de referencia, el nuevo formulario terapéutico para la Seguridad Social fue proyectado con el objetivo de disminuir las barreras de acceso, seleccionando las drogas con criterio de efectividad clínica y la relación costo-efectividad.

Les agradezco a todos que colaboren permanentemente en la construcción de la política nacional de medicamentos, con el único propósito de lograr una Argentina más justa y saludable para todos, con nuevos esfuerzos en una tarea imaginativa, creativa, que estamos llevando adelante en todas las áreas del Estado en momentos límites, porque si bien la Argentina va mejorando, repito permanentemente que siempre hay que imaginarla. Un país que debe el 150 por ciento de su Producto Bruto Interno, que tiene fuertes vencimientos en los años 2005 y 2006, producto del refinanciamiento de bodenes y toda la crisis del 2002, marca que, a pesar de las perspectivas de crecimiento, del mejoramiento que se da, los compromisos argentinos son tan grandes que cada paso concreto que se da es de extrema imaginación y orientado hacia los sectores que más lo necesitan.

Por eso nos alegra fuertemente poder anunciarles a todos este tipo de medidas, continuar profundizando este tema, seguir imaginando, no bajar los brazos bajo ningún aspecto, sino por el contrario repotenciar espiritual y efectivamente toda nuestra acción y entender que hay que hablar con absoluta claridad. No hay actitudes mágicas, ni mandraques ni fundamentalistas ni nihilistas, la Argentina ya ha vivido todo ese tipo de procesos y situaciones. Acá tenemos que salir con racionalidad, buena administración, buen criterio fiscal y decirle la verdad a la gente, cuál es la situación de nuestro país. No vayan a creer que porque hemos mejorado, estamos mejorando y está creciendo la Argentina está todo solucionado, toda esa carga que tenemos sobre nuestras espaldas, la debemos que gobernar día tras día. Lo hacemos con mucha potencialidad y muchas ganas pero es la realidad que tenemos que afrontar. Haciendo frente a este tipo de circunstancias seguiremos profundizando nuestra mira hacia medidas que consoliden la justicia y la equidad en la Argentina.

Muchísimas gracias por estar presentes. (Aplausos)